Por Sara Fontenla
El conectivismo supone un nuevo modelo pedagógico 3.0 inspirador para la comunidad docente. Sus principios y la forma en la que incluye las TIC producen un impacto significativo en el diseño de las actividades de enseñanza y aprendizaje. Metodologías pedagógicas innovadoras y tendencias emergentes a partir de la inclusión de las TIC, como el Mobile Learning, el Flipped Classroom, la Gamificación, los Mundos Virtuales Educativos y los MOOC, son ejemplos del impacto que el conectivismo y la tecnologías ejercen la educación de nuestros días.
El conectivismo
El conectivismo emerge como una teoría del aprendizaje del siglo XXI. A diferencia de sus antecesoras (conductismo, cognitivismo y constructivismo) la teoría conectivista, acuñada por George Siemens en 2004, surge en un contexto marcado por la presencia de las TIC, internet y la web 2.0. Si bien diversos autores afirman que no se puede describir como una teoría del conocimiento completa, sino como una expresión actualizada del socio-constructivismo, lo cierto es que el conectivismo intenta justificar cómo se produce el aprendizaje del ser humano en contacto con internet y las redes sociales. Afirma que el conocimiento existe distribuido y en red, y el aprendizaje es el proceso de conformar conexiones en las redes sociales y tecnológicas (Siemens, 2010).
A diferencia del constructivismo, que establece que los alumnos intentan alcanzar la comprensión a través de tareas que confieren significado, el conectivismo apuesta porque ese significado ya existe y el reto del aprendiz es reconocer los patrones que parecen estar ocultos (Sobrino, 2014). Decidir este significado y la formación de conexiones entre comunidades especializadas son, de forma primordial, las actividades centrales del aprendizaje conectivista (Siemens, 2004).
Las TIC están inherentemente ligadas al conectivismo como parte de la propia actividad cognitiva para conocer y aprender. El conectivismo no se trata de una mera integración de las tecnologías a las acciones formativas, sino de generar la integración de los individuos a las redes de conocimiento y aprendizaje a través de una red personalizada y autónoma (Nava-Casarrubias, 2010).
Un contexto educativo atravesado por lo digital
Las TIC aplicadas al contexto educativo abren la puerta a un mundo de nuevas posibilidades e innovaciones pedagógicas. El fenómeno de las redes sociales y la web 3.0 transforman el modo en que los aprendices se relacionan con el conocimiento y el aprendizaje, superando la dimensión individual/personal para situarse en la grupal/social (Benito, 2010). El aprendizaje colaborativo mediado por las TIC aporta beneficios académicos, sociales y psicológicos a los estudiantes (Roberts, 2005).
Las tecnologías ofrecen a los estudiantes la posibilidad de interactuar, colaborar y participar en grupos, acceder a la información, comunicarse, recibir apoyo desde diversas fuentes, conectar con el mundo real y diversificar las experiencias de aprendizaje. Permiten por tanto que el estudiante tome control sobre su propio aprendizaje, ubicándolos como protagonistas y responsables de su educación, aumentando así su compromiso y motivación.
Un cambio necesario
Citando a Eduard Punset, “ha cambiado el mundo mientras la educación sigue siendo la misma”. La educación del siglo XXI se encuentra en su mayoría estancada en los modelos del siglo anterior. El impacto de las TIC en la educación está retrasado respecto a otros campos profesionales. Existe un desfase entre el aprovechamiento del potencial pedagógico que ofrecen y el uso que se les da en la educación, es una necesidad urgente incluir la tecnología de forma integral en la propuesta pedagógica y reconocer su potencialidad como catalizador del aprendizaje.
Según la teoría del aprendizaje que los sistemas educativos y los docentes profesen, el lugar de la tecnología será distinto. Si se mantienen modelos tradicionales basados en en la transmisión de conocimientos por parte del profesor, será usada como mera reproductora de contenidos y no dará cabida a expresiones colaborativas de acceso al conocimiento. En cambio, si el proceso de enseñanza y aprendizaje se desarrolla bajo modelos actualizados basados en el conectivismo, los docentes podrán hacer un uso innovador de las TIC, sirviéndose de ellas para orientar al alumno hacia la identificación de lo que necesita saber, facilitar su toma de decisiones y la conexión entre nodos de información, presentar de forma novedosa el acceso al conocimiento, contextualizar ejemplos, comparar, representar modelos mentales, promover la participación activa del estudiante y personalizar procesos de aprendizaje.
Las actividades de aprendizaje conectivistas deben motivar y guiar al estudiante hacia la búsqueda crítica y eficiente de información, permitiéndole actualizar su conocimiento de forma permanente. La participación activa del estudiante en comunidades de aprendizaje, así como el diseño de actividades de elevado nivel de interacción que promuevan la colaboración y la comunicación, introducen en el aula el uso de las redes sociales y numerosos elementos digitales que facilitan el intercambio y la creación de sus propias redes de conocimiento (wikis, blogs, microblogging, videoconferencias, podcast, elaboración de recursos multimedia, chats abiertos y grupales, e-portfolio…) La búsqueda y el acceso a la información debe garantizarse y llevarse a cabo a través de diversos canales, recursos y estrategias, mediante una metodología interactiva y colaborativa. El docente debe adquirir habilidades para curar contenidos y recursos ubicados en internet, crearlos y/o reutilizarlos, diseñando actividades de aprendizaje flexibles, contextualizadas y motivadoras.
Retos y desafíos
Para alcanzar el modelo conectivista la educación debe enfrentar retos y desafíos. Tendrá que reconocer, valorar e incorporar las TIC que ya se encuentran disponibles pero que aún no han calado en la educación: redes sociales, recursos educativos abiertos, objetos de aprendizaje, la publicación web, uso de dispositivos móviles, mundos virtuales educativos y videojuegos. Deberá romper las barreras de la escuela convencional aislada para conectarla con un mundo en red y a través de la red, superar la resistencia a la incorporación de la tecnología, así como las diferencias en el conocimiento y uso de las TIC por parte de los docentes y los jóvenes estudiantes. Necesitará vencer debilidades en las gestión de las políticas educativas y actualizar en materia de TIC la formación inicial de los docentes, así como generar mayor investigación académica sobre el papel de las tecnologías, su influencia en la educación y los resultados de aprendizaje derivados de su uso.
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Referencias:
- Siemens, G. (2004) Conectivismo: Una teoría de aprendizaje para la era digital.
- Sobrino, A. (2014) Aportaciones del conectivismo como modelo pedagógico post-constructivista.
- Nava-Casarrubias, A. Carmona, A. Correa, B. (2010) Hacia una educación conectivista.
- Zapata-Ros, M. (2015) Teoría y modelos sobre el aprendizaje en entornos conectados y ubicuos.
- La educación vive un cambio de época. Entrevista a Juan Domingo Farnós (2013).
- Martín, O. Horizontes de innovación en la escuela. Revista Telos Educación 2.0 (2009).
- El conectivismo y las TIC: impulsoras del cambio pedagógico - marzo 21, 2016